La Procuraduría capitalina concluyó, luego de volver a revisar el caso, que la defensora de los derechos humanos Digna Ochoa no fue asesinada sino que ella misma se quitó la vida.
El titular de la dependencia, Miguel Ángel Mancera, dio a conocer que "se concluyó que fue un tema de suicidio".
Luego de hacer las revisiones correspondientes, a solicitud de un amparo que obtuvo la familia Ochoa, es que el Misnisterio Público volvió a revisar el caso.
"Una vez que se ha analizado el asunto, se determina el no ejercicio de la acción penal", indicó el funcionario.
En un comunicado la Procuraduría local informó que luego de revisarse en forma meticulosa y pormenorizada, todas y cada una de las constancias que integran la indagatoria, comprendidas en 90 tomos con 36,970 fojas y 83 anexos, en el que se analizaron diversas y muy variadas probanzas, tanto oficiales como de la coadyuvancia, entre ellas, inspecciones ministeriales, fes ministeriales diversas, necropsia, ampliaciones de necropsia, exhumación de cadáver, testimonios, dictámenes periciales, en las especialidades de criminalística de campo, medicina forense, química forense, balística, genética, patología, documentoscopía, grafoscopía, psicología, entre otros, opiniones emitidas por especialistas de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y expertos externos, así como analizadas diversas líneas de investigación, se llega a la conclusión de reiterar la autorización de no ejercicio de la acción penal.
De esta manera, se concluye de la misma manera sobre el caso, tal y como lo hizo la Fiscalía Especializada en el seguimiento de este caso, creada en el año 2002, al desprenderse de autos que el fallecimiento de la licenciada Digna Ochoa y Placido no fue provocado por terceras personas, sino que fue ella quien se privó de la vida en una acción de tipo suicida.
